En la entrada de esta semana voy a hablar sobre mi experiencia en el proceso emprendedor y las razones por las que he actuado de esta manera. 
Calipso es una iniciativa de bootstrapping realizada por un grupo de profesionales para la creación de una startup tecnológica dirigida al sector del desarrollo de juegos on-line con un énfasis particular en los juegos MMOG para diferentes plataformas. La idea de poner en marcha esta iniciativa y con este formato específico se ha ido gestando a lo largo de este último año y medio e inicialmente surgió con la idea feliz de «voy a hacer un juego on-line». A partir de ese momento, fui realizando una pequeña investigación sobre las distintas tecnologías existentes y otras de reciente aparición y fui creando un pequeño prototipo para ir probando y adquiriendo conocimiento. En este periodo detecté que pese a que existen frameworks de creación de videojuegos estos tienen una serie de carencias. Por un lado tenemos frameworks como Unity, bastante extendidos por la comunidad de desarrolladores de videojuegos que permiten desarrollar juegos multiplataforma pero no ofrecen un gran soporte para la parte multijugador masiva y cuyos clientes web no corren en todos los sistemas operativos.
 
O HeroCloud que sí que está específicamente diseñada para soportar MMOG, pero que también adolece de este último defecto. Una vez detectadas estas carencias, las posibilidades de negocio aumentan y esto es muy importante en cualquier startup. En Calipso dirigir el esfuerzo a desarrollar un juego es una única bala que puede salir bien o no, pero que tiene un único sector de mercado (jugadores). Crear el framework que permita cubrir la necesidad detectada tiene las siguientes ventajas: 
  • Abre el abanico de sectores a los que se pueden acceder al de los desarrolladores de videojuegos.
  • Posibilita la creación de otras alternativas diferentes a la creación de juegos, p.e. el hosting de juegos on-line.
Evidentemente este camino también supone afrontar nuevos retos tanto en conocimientos necesarios como a nivel competitivo. De lo que he aprendido en este camino hay varios factores y alternativas que cualquiera debería considerar y que yo mismo trato de seguir:
  1. Hay que identificar las barreras de entrada. Para poner en práctica una idea deberíamos conocer cuales son los impedimentos que nos vamos a encontrar en el sector y la actividad a la que nos queremos dedicar. En el enlace de la wikipedia hay un listado de alguna de estas barreras. De todas estas yo destacaría inicialmente las de la competencia existente, la financiación necesaria y los conocimientos necesarios para llevar a cabo la idea (lo que se denomina I+D en el listado).
  2. Emprender cualquier idea conlleva un riesgo. Desde que me intereso por este mundillo veo algunas actitudes y escucho comentarios del tipo «la valentía es la principal característica del emprendedor». Para mi esta frase resume la raíz de todo un problema educacional que lleva a dos situaciones: la primera es que la gente considere que montar un negocio es sólo cuestión de lanzarse a ello; la segunda, consecuentemente, es que la gente que así lo hace fracasa. Según el INE en 2010, el porcentaje de muerte de empresas en sus 3 primeros años de vida llega casi al 50% siendo la mayor parte de ese porcentaje (20,1%) las que desaparecen en su primer año. Si tuviera que escoger unas características para alguien que quiere poner en práctica una idea serían las de consciencia y raciocinio. Alguien que emprende debe identificar esas barreras de entrada, que son los riesgos que corre y preparar un plan para minimizarlos y ser capaz de asumirlos. En nuestro caso particular, al escoger bootstrapping, el riesgo ha sido minimizado al tiempo de desarrollo y ajuste de la idea que es algo que podemos asumir.
  3. No te ofusques con tu idea inicial.Supongo que a todo el mundo nos gustaría ver como esa idea feliz y maravillosa que tenemos triunfa y salva el mundo. Poeticamente, esto es muy bonito
    Steve Blank: Customer development model

    pero en la realidad puede ocurrir que esa idea inicial no sea la más adecuada o que este basada en suposiciones sin fundamento real. ¿Cómo identificar cuando una idea es buena? En teoría para que una idea tenga posibilidades de convertirse en una idea de negocio debe tratar de cubrir una necesidad existente en el mercado, o ser capaz de cambiar como la gente realiza las cosas, o ofrecer alguna ventaja respecto a otras soluciones existentes. Según dicen los que han tenido éxito en esto, en la práctica esos pueden ser factores necesarios pero no suficientes y lo mejor que podemos hacer (al menos en IT) es probar, probar y probar. Realizar pruebas reales para ver si nuestra idea funciona como idea de negocio, recoger resultados, modificar acorde a estos y volver a probar. Inicialmente deberíamos desarrollar un mínimo producto viable y con este realizar un estudio de mercado para de esta manera saber si esa maravillosa idea que teníamos inicialmente es realmente tan maravillosa o si hay que modificarla de alguna manera. Esta forma de actuar es la que he escogido para llevar a cabo el proceso de emprendimiento con Calipso.

  4. Mientras no tengas ingresos fijos mantén los costes al mínimo. Creo que esto es lo suficientemente razonable como para no necesitar mayor explicación. Por suerte, para el sector de la TIC los recursos que puede necesitar una startup están disponibles a muy bajo coste. En este sentido hay que considerar la existencia de software en fuente abierta de gran calidad que es posible (y yo diría que para una startup usar proyectos de este tipo es hasta necesario) emplear. En Calipso el software de fuente abierta es muy importante y forma parte fundamental de nuestra filosofía de trabajo. De la misma forma, en estas fases iniciales hacemos uso de los planes gratuitos de los proveedores de cloud.
  5. No trates de hacerlo solo. Por muchos factores es bueno tener un equipo multidisciplinar con habilidades diferentes y que se complementen en el proceso de creación. ¿Significa esto que si no tienes de partida un equipo no puedes emprender? No, pero será otra barrera de entrada que habrá que solucionar en algún momento.
  6. No te precipites en lanzar un producto. El porqué de esto es que todos los productos tienen fallos o inicialmente no están lo suficientemente ajustados como para cubrir las necesidades de los clientes. Con una metodología de desarrollo de cliente este problema no es tan grave, pues los pocos clientes que tengas o son early-adopters y por tanto más tolerantes a fallos o al no realizar un lanzamiento a gran escala desde el inicio, el crecimiento vendrá de forma natural conforme el producto llegue a la madurez tecnológica. Eric Ries lo explica bien en este artículo.
Principalmente estas son las conclusiones que he ido sacando durante este tiempo. En el siguiente artículo hablaré de las distintas posibilidades de financiación que he considerado. Además os animo a que si tenéis cualquier duda, comentario o pregunta al respecto la realicéis, pues será constructivo. Nos vemos la semana que viene.